WikiLeaks anunció que desde 2006 el régimen de EEUU planea derrocar a Al-Assad
El gobierno sirio de Bashar Al-Assad se encuentra en la mira de Estados Unidos, desde el 2006, así lo anunció hace tiempo el portal WikiLeaks tras revelar documentos clasificados que detallan un estudio pormenorizado del escenario sirio y las posibilidades de generar presión para lograr derrocarlo. Los planes actuales de intervenir militarmente Siria por parte del gobierno de Obama, demuestran la continuidad de su estrategia en la región.
Estados Unidos está evaluando realizar una intervención militar en la República Árabe de Siria, así lo ha dado a conocer durante los últimos días. Su argumento es una respuesta a un supuesto ataque con armamento químico de destrucción masiva que el gobierno de Obama, al igual que sus socios en Europa y Oriente Medio, atribuye al Ejército Árabe Sirio. En dicho escenario salen a relucir documentos clasificados de Estados Unidos, revelados por WikiLeaks durante el 2012, en el que se observan las intensiones de derrocar al gobierno de Bashar Al-Assad.
Se trata de un informe secreto emitido el 13 de diciembre de 2006 por la Embajada de los Estados Unidos en Damasco. Allí se realiza un minucioso análisis de las “vulnerabilidades” del gobierno de Al-Assad y los distintos elementos para generar presión. Observa la posición fuerte en la que se encuentra Siria a nivel nacional e internacional y evalúa “si bien puede haber presión bilateral o multilateral adicional que puede afectar a Siria, el régimen se basa en un pequeño grupo que es en gran medida inmune a tal presión. Sin embargo, la creciente autoconfianza de Bashar Al-Asadd – y la confianza en este pequeño grupo – podría llevarle a cometer errores y decisiones políticas mal juzgados por medio de reacciones emocionales de marca a los desafíos, que nos proporciona nuevas oportunidades”.
El cable diplomático sugiere que el gobierno de Estados Unidos puede enviar señales mediante acciones y declaraciones que contribuirán a aprovechar las oportunidades que otorgan las vulnerabilidades de Al-Assad, “estas propuestas tendrán que ser desarrolladas y convertidas en acciones reales y tenemos que estar preparados para actuar rápidamente para tomar ventaja de estas oportunidades”, señala el informe. Para esto analizan utilizar “la diplomacia pública y los medios más indirectos para enviar mensajes que influyan en el círculo interior”.
Allí reconoce que el gobierno de Al-Assad presenta ciertas fortalezas, mantiene una economía estable y se enfrenta a una oposición débil, aunque existen ciertas “vulnerabilidades” que “pueden ser explotadas para ejercer presión sobre el régimen”. Se refiere a “acciones que permitan que Bashar pierda el equilibrio y aumente su inseguridad, por su inexperiencia y su muy pequeño círculo de toma de decisiones que lo hacen propenso a tropezones diplomático que lo pueden debilitar a nivel internacional como nacional. Si bien las consecuencias de sus errores son difíciles de predecir y los beneficios pueden variar, si estamos dispuestos a actuar con rapidez para aprovechar las oportunidades que se puedan abrir, podríamos directamente influir en el comportamiento del régimen donde importa: Bashar y su círculo íntimo”.
El cable señala que dentro de aquel “círculo íntimo” existen personas descontentas con Al-Assad que se contactaron con la Embajada de los Estados Unidos durante el 2005 y junto a la diplomacia realizaron un análisis del futuro de Siria sin Al-Assad.
Dentro de las “vulnerabilidades” que señala, nombra la estrecha relación que el gobierno de Al-Assad mantiene con la República Islámica de Irán, que se manifiesta desde la construcción de una mezquita hasta negocios. Al respecto informa la existencia de sectores en desacuerdo con dicha relación, los sunníes que se encuentran enfrentados a la mayoría religiosa iraní, chiíes. Otra cuestión que planea utilizar, es el conflicto con los kurdos, una minoría étnica ubicada en el noreste de Siria y en las ciudades de Damasco y Aleppo.
A su vez, menciona los problemas económicos como otro elemento sensible a tener en cuenta, por lo que busca “destacar los fracasos de la reforma” económica que el gobierno intenta llevar adelante. Otro elemento clave es la utilización del “terrorismo”. “El argumento de que Siria es también una víctima del terrorismo debe ser usado en su contra para dar mayor protagonismo a aumentar los signos de inestabilidad en Siria”, detalla el cable.
Dentro del plan de acción, una tarea clave es “fomentar rumores” para aumentar la paranoia sobre la existencia de golpistas dentro de las fuerzas militares, incitando a Egipto y Arabia Saudita a reunirse con figuras como el ex-vicepresidente Khaddam, abierto opositor de Al-Assad a favor de la intervención militar de las fuerzas de occidente en Siria.
Se trata de un informe que revela como Siria permanece en la mira del Imperio desde hace tiempo, y como los planes actuales de realizar una intervención militar, responden a una estrategia de los Estados Unidos anterior a las acusaciones de utilización de armamento químico por parte del Ejército Árabe Sirio.