Por una guerra, nació la relación con Japón

Por Patricio Del Corro para Ambito Financiero Publicado el 8 de enero de 2015 El 7 de enero de 1904, en el puerto de Génova, autoridades argentinas entregaron a sus pares japonesas los acorazados Moreno y Rivadavia, de reciente adquisición por el Gobierno del presidente Julio Argentino Roca, para que sirvieran a la emergente potencia asiática en la guerra que ésta se aprestaba a tener, a la postre, victoriosamente, con Rusia. La construcción del acorazado Moreno fue autorizada (al igual que la del Rivadavia) en 1908 como respuesta a la pareja brasileña Minas Gerais y Sao Paulo, lo que agregó más tensión en el continente.