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Mostrando entradas de septiembre 25, 2011

El Pentágono apunta a un ataque a Pakistán

>Por Pepe Escobar(*)(**) Siria tendrá que esperar. Es seguro que la próxima parada en la “guerra prolongada” acuñada por el Pentágono será Pakistán. Cierto, ya existe una guerra en lo que el gobierno de Barack Obama bautizó como AfPak. Pero la fase decisiva en el propio Pak surge cada vez más cerca. Llamémosla la campaña “en la que ninguna bomba se queda atrás”. Al Qaida es algo del pasado; después de todo, activos de al Qaida como Abdelhakim Belhaj dirigen ahora Trípoli. El nuevo mega-coco fabricado en Washington es ahora la red Haqqani. Una implacable industria de fabricación de consenso que apunta a Haqqani ya está a toda marcha, a través de una constelación de los usuales sospechosos neoconservadores, belicistas republicanos surtidos, “funcionarios del Pentágono” y socios del complejo industrial/militar en los medios corporativos. La red Haqqani, una fuerza de entre 15.000 y 20.000 combatientes pastunes dirigidos por el ex personaje muyahidín antisoviético Jalalludin Haqqan

La economia mundial volvera a estallar en 2012 o antes

>Por Miguel Giribets (especial para ARGENPRESS.info) Mientras que el PIB mundial es de 70 billones de dólares, el mercado de obligaciones es de 95.000 billones de dólares (más de 1.000 veces más), las bolsas “valen” 50.000 billones de dólares (casi 1.000 veces más) y los derivados “valen” 466.000 billones de dólares (más de 6.500 veces). Una situación insostenible. Lo que hay detrás de las cifras de obligaciones, valores de bolsa y derivados es un capital especulativo que es varios miles de veces superior a la economía real. Ante esta masa de capitales, la tasa de beneficio tiende a cero de forma imparable, pues los beneficios salen -a fin de cuentas- de la economía real. El sistema capitalista va hacia el colapso. Cada 2,4 horas se mueve un monto de dinero en el mundo ¡equivalente a todo el PIB de un año!. Una forma de fondo especulativo son los Hedge Funds. El 60% de ellos están en paraísos fiscales, lo que quiere decir que no tienen control de gobierno alguno. En los paraís

Populismo

>por Ernesto Laclau Cualquier definición presupone un marco teórico que dé sentido a lo que es definido. Este sentido solamente puede ser establecido sobre la base de la diferenciación entre el término definido y algo que la definición excluye. Esto presupone un terreno dentro del que dichas diferencias son pensables. Éste es el terreno que no es inmediatamente obvio cuando llamamos populista a un movimiento, a una ideología o a una práctica política. En los dos primeros casos — movimientos o ideologías — denominarlos populistas envolvería diferenciar ese atributo de otras caracterizaciones en el mismo nivel de definición, tales como “fascista”, “liberal”, “comunista”, etc. Esto nos involucra inmediatamente en una tarea complicada y últimamente contraproducente: encontrar aquel reducto último donde encontraríamos populismo “puro”, irreductible a aquellas otras caracterizaciones alternativas. Si intentamos hacer esto entramos a un juego en el que cualquier atribución al populismo de