Perón y ·la huelga de los trabajadores de La Forestal"

Por Fernando Algaba
para La Opinión
publicado el 4 de febrero de 2014

En la foto publicada se observa al Coronel Ernesto Mastropiedra y a su asistente el joven Teniente J. D. Perón (lamentablemente esa foto se borro, y no pudimos recuperla) en una estación de ferrocarril santafesina en 1917. Quien envió la foto apunta que había sido durante una huelga ferroviaria. La "Cronología Peronista 1893 a 1974" (www.historiadelperonismo.com) podría aportar más precisiones sobre ese año y momento de la foto, en su blog: "J. D. Perón es enviado a Villa Guillermina (Sta. Fe) con tropas a su mando, para conservar el orden en una huelga de los obreros de "La Forestal", por mejoras salariales y condiciones de trabajo.

La empresa les corta el suministro de agua y cierra el almacén, esperando que el ejército reprima a los huelguistas. El joven teniente no sólo no reprime, sino que obliga a la empresa a restablecer el agua y los víveres". Según el Facebook Perón Juan Domingo, en la nota, "El Capitán conciliador en los conflictos sociales. No a la represión! Del 6 de marzo de 2009: En 1917, con 24 años de edad, es enviado a reprimir un conflicto gremial en la Forestal, establecimiento inglés en Villa Guillermina, Santa Fe. Sin embargo, Perón muestra una actitud conciliadora hacia los obreros, destrabando el conflicto sin reprimir". 

Por otro lado en la Formación de Juan Perón. Por Juan D. Perón (www.nomeolvidesorg.com.ar): "The Forestal Land, Timber an Railways Company Ltd, más conocida como La Forestal, es una empresa británica que explota la extracción del tanino en el Chaco y el norte santafesino. Emplea a 5.000 trabajadores y les impone condiciones de trabajo inhumanas, ignominiosas y esclavizantes. Los trabajadores se levantan en huelga para mejorar esas condiciones y la empresa les cierra los almacenes y retira las bombas de agua. 

El teniente Perón es destinado a la zona para "mantener el orden". Su testimonio, clave para entender el resto de su trayectoria en la vida, es el siguiente: en contacto con los huelguistas que se hallan armados, estos le informan que "Hace un mes que estamos en huelga; carecemos de agua y de víveres porque el almacén y la bomba de agua son de La Forestal, y la fábrica cerró el almacén y sacó las bombas". Perón ordena a la empresa reabrir el almacén y colocar nuevamente las bombas de agua. Años después recuerda los episodios de este modo: "Si yo hubiera sido uno de esos obreros y me cortan el agua, los víveres y cuanto resulta indispensable para la subsistencia de mi familia y de mis compañeros, no hubiera aguantado tanto tiempo como los trabajadores de Villa Guillermina. Hubiese asaltado el almacén y hecho funcionar el agua por mi cuenta".

Fuente


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El Regimiento 12 de Infantería tenía en 1913 asiento en Paraná; ese fue el primer destino de Juan Domingo Perón luego de su egreso en el Colegio Militar. Posteriormente, el joven Perón es enviado a Santa Fe y contuvo demandas sociales en Villa Guillermina y San Cristóbal. El recuerdo de estos pasos al momento de su muerte.

Fue Nuevo Diario el que publicó el 3 de julio de 1974 el recuerdo del primer paso de Perón por Santa Fe.

Durante su permanencia en Santa Fe formó un núcleo de amigos que mantuvo incólume en el transcurso del tiempo y fue destinado en 1918 para asegurar la tranquilidad en la localidad de Villa Guillermina, departamento General Obligado, donde existía un problema gremial con La Forestal. Nótese que Perón luego de su primer destino es trasladado a Buenos Aires y luego retorna a nuestra ciudad, donde continúa su labor militar y de captación del medio ambiente humano, donde sus comprobaciones sobre la forma de vida de la población, brindaron seguramente al futuro renovador materia especial de estudio y una experiencia de innegable valor.

En el Regimiento 12, Perón creó una compañía teatral, practica deportes y lo enseña: fútbol, boxeo, tiro, esgrima, equitación.

El hombre que llegaría al más alto grado en la escala jerárquica de la carrera que abrazó por vocación natural, templó su carácter en los días iniciales de su profesión, aquí, en Santa Fe, en la ciudad de Garay que con el tiempo aclamaría su nombre en las contiendas cívicas y le respaldaría varias veces en las urnas. Su paso por el Regimiento 12 de Infantería fue trascendente y Perón nunca olvidó ese hecho y las enseñanzas recibidas de su maestro extraordinario, el entonces capitán Descalzo.

El breve artículo de Nuevo Diario, con varias fotografías, finaliza:


Su tacto en Villa Guillermina, al garantizar el orden y restituir a los obreros el goce de derechos elementales –se les había cortado el agua y las provistas del almacén que manejaba a su antojo La Forestal—hacen ya al estratega y conductor que ha de juzgar la historia definitivamente como al mismo hombre por el que hoy la República está de duelo, inconsolablemente.