Etiología, apogeo y decadencia del Estado Terrorista
Horacio Verbitsky Escarmientos El bombardeo de 1955 a la Ciudad Abierta de Buenos Aires, los fusilamientos de 1956 y el golpe de 1976, cuya impunidad clausuró la Corte Suprema de Justicia, tienen un punto en común: el terror indiscriminado como escarmiento, para imponer una distribución regresiva del ingreso y del poder. Llamar a las cosas por su nombre, castigar esos crímenes, es un punto de partida hacia el replanteo de esa relación de fuerzas que condena a la exclusión a casi la mitad del país. El 16 de junio se cumplió medio siglo del bautismo de fuego de la Aviación Naval y de la Fuerza Aérea, cuando sus pilotos arrojaron entre 9 y 14 toneladas de bombas sobre la Ciudad Abierta de Buenos Aires y ametrallaron a civiles, causando alrededor de 300 muertos y un millar de heridos. El 9 de junio hicieron 49 años de los fusilamientos de civiles y de militares ordenados por el gobierno de facto del general Pedro Eugenio Aramburu y el almirante Isaac Francisco Rojas, mal