21 de agosto de 1946; el Senado aprueba el proyecto sobre derechos políticos de la mujer
Por el Prof. Daniel Chiarenza
Luego de recorrer los antecedentes parlamentarios sobre sufragio femenino en el país, desde 1919 hasta 1939, señalaba el atraso en la materia e incluía con su enfoque crítico a lo hecho por su propio partido.
Publicado el 21 de agosto de 2010
En un trabajo publicado en abril de 1941 en el mensuario Hechos e Ideas, el Dr. Eduardo Madariaga, jurisconsulto correntino y militante de la U.C.R., a la vieja fórmula de sufragio universal: un hombre, un voto, le agregaba la de una mujer, un voto, título de su artículo.
Luego de recorrer los antecedentes parlamentarios sobre sufragio femenino en el país, desde 1919 hasta 1939, señalaba el atraso en la materia e incluía con su enfoque crítico a lo hecho por su propio partido.
-El ejemplo de San Juan -decía-, no obstante las imperfecciones del empadronamiento femenino, debió ser imitado por las provincias y por la Nación, cuando para ello sobraban las mayorías democráticas.
Aludía el autor al voto universal de las mujeres -en el orden provincial y municipal- incorporado por el bloquismo a la constitución sanjuanina de 1927.
Gracias a la reforma de la constitución provincial en 1927, las mujeres sanjuaninas pueden votar por primera vez en Argentina, en abril de 1928.
En el orden nacional, el atraso iba a ser reparado entre 1946 y 1947, en el lapso de un año.
En efecto, el 21 de agosto de 1946, el Senado aprobó el proyecto de ley que otorgaba los derechos políticos a la mujer; y quien iba a apurar el expediente parlamentario se llamaba Eva Perón, flamante Primera Dama.
Apenas repuesta de sus flaquezas físicas, el 11 de septiembre del mismo año, visitó la Cámara de Diputados y reclamó el pronto tratamiento del proyecto, que ya contaba con media sanción, ante los parlamentarios Ricardo C. Guardo, Raúl Bustos Fierro, Oscar Albrieu y Alcides Montiel.
Y no descansó ante el trámite pendiente.
Evita visita la Cámara de Diputados.
El 27 de enero de 1947, en una comunicación radial al país, habló del sentido del voto femenino esperado.
El 14 de marzo, en un nuevo mensaje a la Nación, sintetizó: -Ha llegado la hora de la mujer que comparte una causa pública y ha muerto la hora de la mujer como valor inerte y numérico de la sociedad.
Su ausencia, por el viaje a Europa, dio un respiro a los legisladores peronistas; pero no bien estuvo de regreso, volvió a la carga.
Eva Perón se dirige al país por la cadena nacional de Radio.
El 30 de agosto de 1947 el diario Democracia difundía una Carta de la Primera Dama a las mujeres argentinas.
¿Tema principal?
-Algunos dirán para qué queremos votar las mujeres. Yo sé que hay quienes se formulan esta pregunta. Invitémosles a recorrer las páginas de nuestra historia, decía Evita.
Y recordó entre las protagonistas a Juana Azurduy de Padilla.
Con septiembre llegó, al fin, la Ley 13.010 y en la tarde del 23, una gran concentración en la Plaza de Mayo dio aire de fiesta a la promulgación. Ella dijo que le temblaban las manos -al contacto del laurel que proclamaba la victoria.
Y esto otro con la verdad más pura: -Aquí está, hermanas mías, resumida en la letra apretada de pocos artículos, una historia larga de luchas, tropiezos y esperanzas.
Cristina Fernández de Kirchner, primera presidenta argentina elegida por el pueblo de la Nación para ejercer ese cargo.
Hoy, orgullosamente, tenemos una mujer al frente de la presidencia constitucional, directamente elegida por el pueblo: la compañera Cristina Fernández de Kirchner.