Los medios hegemónicos buscan disimular el consenso en torno al Informe Candela

Germán Celesia
Agencia Periodostica de Buenos Aires


Cargan de impronta negativa al dictamen de la mayoría. Aducen motivaciones ocultas del “kirchnerismo”, minimizan la mirada compartida de casi todo el oficialismo y la mayor parte de la oposición y hasta reproducen acusaciones no incluidas en el escrito.
No hubo “informe k”, fruto de una mirada delimitada a un supuesto sector “ultra” del oficialismo; no se pidió la renuncia del Ministro de Seguridad, Ricardo Casal, ni se realizaron señalamientos político-partidarios al gobernador, Daniel Scioli. Sin embargo, los medios dominantes procuran hoy dañar la imagen pública de una comisión parlamentaria creada en el Senado bonaerense para investigar la actuación de los otros dos poderes del Estado en relación con el asesinato de Candela Rodríguez, ocurrido hace casi 13 meses. La Comisión presentó un informe por mayoría y dos informes minoritarios. El que fue rubricado por siete de los nueve integrantes de la comisión- supuestamente el que tendría “impronta K” – fue leído, según reconoce Clarín, por una legisladora perteneciente al bloque de la opositora Coalición Cívica, una de las firmantes junto con el Frente Amplio Progresista y casi todo el oficialismo.

El diario El Día advertía, en tanto, que se avecinaba un “informe k”, obra de legisladores que “responden a la conducción del vicegobernador Gabriel Mariotto”. Según anticipó ayer, el dictamen de mayoría correspondería “al ΄núcleo K΄ de la Comisión”, lo cual sería “un reflejo de que las diferencias políticas influyeron de alguna manera en sus conclusiones sobre la investigación del caso Candela”. No obstante, el informe fue rubricado por siete de los nueve miembros de la Comisión, entre ellos los de la Coalición Cívica y el Frente Amplio Progresista, dos fuerzas que ningún medio se atrevería a incluir en el “núcleo k” de ninguna comisión parlamentaria.
Al cumplirse un año del asesinato, el diario Clarín publicó un artículo sin firma en el que decía: “aunque su trabajo se desarrolló en el marco de la guerra que el vicegobernador Gabriel Mariotto le declaró a Daniel Scioli, las actas de la investigación muestran claramente hasta qué punto las irregularidades contaminaron el expediente. Sin embargo, el expediente también fue contaminado por las internas políticas”. Sobre la comisión, decía, sin alusión a fuente: “muchos creen que fue formada y digitada por el vicegobernador Mariotto para desgastar a Scioli y a Casal”. Además, un artículo adicional, firmado por Rodolfo Lara, se titulaba: “La Comisión Candela, otro round en la pelea que impulsa Mariotto contra Scioli”, donde decía, por ejemplo: “El dato es que la investigación fue promovida por el vicegobernador Gabriel Mariotto, y el Frente para la Victoria integra y preside la Comisión. Explicita la confrontación del kirchnerismo provincial, que responde a la Casa Rosada, con la estrategia del gobernador para prevenir y reprimir el delito, además de las políticas del Servicio Penitenciario”. De ser cierta esta afirmación, los legisladores de las fuerzas creadas por Elisa Carrió y Hermes Binner se habrían sumado a una estrategia diseñada desde el gobierno nacional. Además, según decía Lara, “Mariotto intenta barrer, sin mínimo resultado, la primera línea de Seguridad bonaerense, incluido el ministro Ricardo Casal”, cosa que no sucedió.
El corresponsal de La Nación, Pablo Morosi, decía entonces: “Prevén duras críticas a Scioli en el informe por el caso Candela”, ya que “El kirchnerismo objetará la política de seguridad”. Se obviaba aquí también a los legisladores opositores que firmaron el dictamen de mayoría. Además, el columnista Joaquín Morales Solá se refería al “ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal, convertido desde hace mucho tiempo por el kirchnerismo en la bestia negra del sciolismo”.
Las coberturas de hoy
¿Cómo disimular el amplio respaldo parlamentario al informe? Hoy Clarín titula: “Caso Candela: el kirchnerismo volvió a apuntar contra Casal”, lo que de por sí obvia que fue compartido el diagnóstico por casi todo el oficialismo y la mayor parte de la oposición parlamentaria. Pero hay más, según el periodista Rodolfo Lara, que firma el artículo, “a último momento sacaron a Scioli del dictamen. Un borrador lo mencionaba como ΄responsable político΄ (…)”, destaca en el sumario de la nota.
En el desarrollo del artículo, el corresponsal de Clarín prioriza parte del texto que supuestamente fue retirado del informe final, asignándole mayor importancia que el contenido efectivamente presentado, y cuya existencia es perfectamente comprobable. “A última hora, en el dictamen final, los senadores kirchneristas obviaron mencionar al gobernador Daniel Scioli como ΄responsable político΄ del control institucional de la policía. Ese abordaje estaba en el documento original que manejaban los senadores k bajo el rótulo ΄responsabilidades políticas, de conducción política y operativa΄(…)”, dice Lara, aunque ni siquiera reproduce la supuesta mención.
Según el periodista, “algunos miembros dela comisión”, que no menciona, realizaron “consultas con el gobierno de Cristina Kirchner sobre la conveniencia de cuestionar directamente al gobernador”. ¿A la presidenta, a un ministro, al jefe de Gabinete, a un funcionario de menor jerarquía? El periodista no da ninguna precisión. No obstante, según dice, “las resoluciones (…) tienen una espesura política que condicionan la gestión del gobierno provincial”.
El diario La Nación pone el Eje en que “Mariotto pide descabezar a la bonaerense”, aunque el vicegobernador no integra la comisión – y por lo tanto no firmó el dictamen – aunque sí promovió su conformación y envió las conclusiones al Ejecutivo. Para María José Lucesole, el vicegobernador “recomendó separar de su cargo y exonerar a la cúpula de la policía de la provincia de Buenos Aires”. Y “sugirió además reformular toda la política de seguridad a cargo del ministro Ricardo Casal”. La periodista concede que el dictamen contó “con el aval de la oposición del Senado”. Luego detalla el pedido de juicio político a miembros el Poder Judicial y de exoneración de miembros de la policía y dice que el senador Alberto De Fazio (FPV) “que firmó un dictamen por la minoría dado que milita en la agrupación La Juan Domingo, creada para propiciar la candidatura presidencial de Scioli, criticó duramente la decisión de Mariotto”, ya que. “Intentan dañar al gobernador” y “no hay motivos para sancionar o exonerar a la policía”, según el legislador. El otro dictamen de minoría fue firmado por Aníbal Assef, del Pro-peronismo
Para Lucesole, “el informe incluso rozó al gobernador” porque objetó la presencia de “políticos” en la escena del crimen. “Cabe recordar, el día del hallazgo del cuerpo, Scioli y Casal estuvieron en el lugar junto con la madre de la víctima”, dice.
En nota aparte, Pablo Morosi habla, en un artículo titulado “Una interna que oscurece más el caso” del “relato construido en el informe”, que “puso sobre la mesa, como nunca antes, una acusación de carácter institucional sobre la siempre sospechada y denunciada connivencia policial con el delito organizado, así como la incapacidad de la Justicia para resolverlo”.
Además, “el trabajo, avalado por las firmas de legisladores del Frente para la Victoria y la oposición y promovido por el vicegobernador Gabriel Mariotto, va más allá y desliza posibles responsabilidades del gobierno conducido por Daniel Scioli, al que no sólo reprocha por su política de seguridad, sino que le reclama cambios en la materia”.
Según Morosi, “la intención de subrayar el carácter paradigmático del caso Candela como eslabón de un sistema corrompido y agotado basado en un tácito acuerdo de autogobierno a cambio de regulación del delito, representa el cuestionamiento de fondo que Mariotto y otros sectores vinculados con la Casa Rosada vienen señalando desde hace tiempo y que hacen eje en la figura del ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal, para muchos, un objetivo subalterno que sólo busca dañar la proyección de la figura de Scioli como eventual candidato presidenciable en un todavía lejano 2015”. Aquí nuevamente el “muchos” justifica una acusación de tipo genérico, sin sustento empírico visible, mientras que al hablar de “relato” parece aludirse a una supuesta dicotomía que según los medios hegemónicos existiría entre el discurso del oficialismo nacional y la realidad de nuestro país. Según Morosi, “más allá de las ya irreconciliables posturas ideológicas acerca de las políticas de seguridad, la disputa desatada en el interior del oficialismo tiñe y descompone aún más lo infausto del caso y sus alrededores”.
Por su parte, “piden echar por el caso Candela al jefe de la Policía bonaerense”, es el título de tapa del diario El Día, el matutino que dio mayor despliegue a la noticia. Allí dice: “La comisión del Senado provincial que analizó la causa le recomienda al Gobernador exonerar al comisario Matzkin y a otros altos jefes policiales. Así lo votaron senadores kirchneristas y de la oposición. Exigen sanciones en la Justicia”, informa con corrección. En el interior de la edición, no obstante, el diario insiste con algunas lecturas amañadas. En la nota central afirma: “Senadores K pidieron que se eche a otros altos jefes policiales y el jury de cuatro magistrados”, obviando que se trató de un dictamen multipartidario. Además, para El Día, el dictamen mayoritario constituye una “dura embestida al gobierno de Daniel Scioli”, aunque “las conclusiones no lograron unanimidad”.
El matutino del Grupo Kraiselburd publica asimismo una opinión sin firma titulada: “La pelea entre los sectores ultra K y Scioli, en el trasfondo político”, en la que insiste en estigmatizar a los autores de la investigación. Dice que la comisión “nació en el arranque de la dura avanzada que desarrollan los sectores ultra K que reportan directa y únicamente a la Casa Rosada sobre Daniel Scioli y su gestión al frente del Ejecutivo bonaerense. Y el dictamen consecuente de ese trabajo terminó de la misma manera: cruzado por la feroz interna del oficialismo”.
Destaca que fue el vicegobernador Gabriel Mariotto quien “ordenó “la formación de una comisión especial que analizara “las ΄irregularidades΄ judiciales y policiales que ya daban por ciertas en la investigación del caso”.

Al hablar del informe de mayoría, el diario afirma que “sus autores creen haber adecuado a la ΄tregua΄ que rige en la pelea del oficialismo”, con lo cual parece mezclar al FAP y la CC con la “interna” del FpV.
Aparte, el diario habla de “duras críticas a la Procuración y a Seguridad”: dice que el dictamen “hace blanco en el ministro Ricardo Casal”, aunque “no lo nombra”. Y además “roza el accionar de la Procuración de la Corte”. También destaca el “silencio” del Ejecutivo y agrega: “desde el sciolismo rechazan las imputaciones”. Allí se reproducen dichos del senador “sciolista” Alberto De Fazio, quien dejó al margen al vicegobernador: “Yo no creo que Mariotto avale semejante disparate, yo saco al presidente de la Cámara que no tiene nada que ver con este informe. Este es un informe firmado por gente de la oposición y algunos compañeros del bloque del FpV que evidentemente no han tomado la dimensión política de lo que han dicho”, dijo. En busca de atenuar esa afirmación, el diario reproduce palabras del “kirchnerista” Jorge Ruesga, quien aseguró que Mariotto “estaba al tanto del informe”. Este “contrapunto” es una de las notas centrales del portal La Tecla y es destacado por el diario Hoy y varios portales.
El Día publica además el “informe síntesis” de manera completa – lo que constituye un documento periodístico de enorme valor – y realiza un resumen de la actuación judicial en un artículo titulado: “A un año del horror, un caso que ha vuelto a foja cero”.
Con menor despliegue, el diario Hoy titula su crónica principal: “Por el crimen de Candela, el Senado pide castigo a jefes policiales y fiscales”. Destaca que El informe de la mayoría “pide la exoneración de muchos de los policías que intervinieron”.
A tono con las líneas de análisis impuestas por Clarín, para el diario de la familia Balcedo, “la llamada comisión Candela fue creada a instancias del propio Mariotto como otro de los intentos para minar la administración del gobernador Scioli. Fundamentalmente en el blanco preferido del kirchnerismo, la gestión de su ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Casal”, aunque “el informe no apunta directamente al titular de la cartera de Justicia y Seguridad”.

Ver: Comision Candela. Informe final