Las victorias de Evo

>Por la Redacción de APAS

La economía boliviana atraviesa hoy uno de los mejores momentos de su historia, aunque siempre existe la posibilidad de avances superiores, según declaraciones recientes de especialistas.

El país suramericano exporta cada año cerca de ocho mil millones de dólares y su deuda externa es de unos tres mil 200 millones, por lo cual se podría pagar en apenas cinco meses, afirmó el presidente del Banco Central de Bolivia (BCB), Marcelo Zabalaga.

Zabalaga confirmó también que el Producto Interno Bruto (PIB) llega a los 22 mil millones, e indicó que la diferencia con relación al mandato del general Hugo Bánzer (1971-1978) es muy marcada.

Para entonces, recordó, la deuda alcanzaba el 50 por ciento del PIB y ahora no es más que el 14.

Las declaraciones de Zabalaga contrastan con versiones de la oposición, que intenta tergiversar la realidad boliviana.

Al mismo tiempo, el presidente del BCB, explicó que la deuda interna no afecta las reservas internacionales netas, las cuales sobrepasan hasta el momento los 12 mil millones de dólares.

Sin embargo, hay aspectos en los cuales se puede mejorar mucho, entre ellos en la minería.

El ministro del ramo, José Pimentel, admitió la semana anterior que solo el 15 por ciento de los minerales se funden en Bolivia y el resto se va en forma de concentrados.

"Quiero decirles que la minería goza de buena salud, los precios de los minerales" son excelentes, y están mucho más allá del costo de producción, aseguró Pimentel.

También recordó que en los dos últimos meses los precios bajaron, pero esa disminución la consideró insignificante respecto al alza de los años recientes.

Este año, adelantó, las minas bolivianas batirán el récord histórico de exportaciones, con una cifra cercana a los tres mil 200 millones de dólares.

El ministro salió al paso a quienes dicen que Bolivia es monoproductor de minerales y recordó que ya no es el estaño el que aporta los mayores ingresos, sino la plata.

De los tres mil millones, aproximadamente una tercera parte es de plata, en tanto el estaño llega a 250, seguido del zinc y el plomo, precisó Pimentel.

Para el ministro, lo más importante, sin embargo, son los esfuerzos que realiza el gobierno del presidente Evo Morales con vistas a industrializar el sector.

La industrialización es una de las prioridades porque las plantas metalúrgicas permitirán el procesamiento de esos productos, lo cual mejoraría considerablemente los ingresos, además de constituir una fuente de empleos.

Luis Arce, titular de Economía y Finanzas Públicas, recordó que desde el inicio del primer mandato del presidente Evo Morales, Bolivia ha apostado por un nuevo modelo económico.

Trabajamos desde entonces sobre la base de la recuperación de sus recursos naturales y con una política de manejo austero de los fondos, dirigidos a proyectos productivos y obras de beneficio social.

Arce se refirió al superávit fiscal, al crecimiento sostenido de la economía, el dinamismo de la inversión pública y a la continua expansión de los depósitos y créditos del sistema financiero.

También a la bolivianización de las operaciones bancarias, que alcanzan casi el 70 por ciento en la moneda del país.

Todo esto lleva aparejado mejoras sustancias de los indicadores sociales, como la disminución de los niveles de pobreza, mayor acceso a los servicios, entre otros aspectos de la política de redistribución de ingresos aplicada por el presidente Morales.