Fondos buitre: sobornos en el Congreso estadounidense para manifestarse contra Argentina

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Luego de que la Corte Suprema de Estados Unidos rechazara la apelación de Argentina en el caso que enfrenta la nación contra los fondos especulativos NML, Aurelius y Blue Angel -entre otros-, denuncias de sobornos revelan la injerencia de los llamados “fondos buitre” en el Congreso estadounidense. Incluyen a Robert Méndez, Marc Rubio, Mark Kirk y Connie Mack.
Esta semana, los llamados fondos buitre -tenedores de bonos de deuda externa argentina comprados en default que exigen a la nación un pago equivalente a más del 1.600 por ciento de rentabilidad- consiguieron una gran victoria: el máximo tribunal rechazó la apelación argentina ratificando así la decisión del juez neoyorkino Thomas Griensa a partir de la cual se ordena a la Argentina a pagarles 1.500 millones de dólares.

El pasado miércoles, el diario Buenos Aires Herald (Ver nota) sacó a la luz la injerencia de los fondos especulativos en la política de Estados Unidos a través de grandes donaciones en efectivo realizadas por NML a los líderes en el Congreso, tanto del Partido Republicano como del Partido Demócrata.

El fondo NML es el mayor beneficiario en el juicio contra el Estado argentino, al que le corresponderían más de la mitad de la cifra reclamada, es decir 832 millones de dólares, tras haber comprado originalmente bonos de deuda en default por 48,7 millones de dólares en 2008 -lo que representa una tasa de aumento de 1.608 por ciento en un lapso de seis años-.

Su dueño es Paul Singer, un multimillonario republicano vinculado al Tea Party -el ala de extrema derecha dentro del Partido Republicano-. Entre sus socios dentro de NML figura la esposa de Mitt Romney, candidato presidencial republicano que perdió las elecciones contra Barack Obama.

En esta ocasión, los dos mayores receptores de los sobornos del fondo NML fueron el demócrata Robert Méndez -senador por Nueva Jersey- y el republicano Marc Rubio -senador por Florida, según publica el diario estadounidense.

Elliot Management Corporation, fundada por Singer quien se desempeña como director general de la sociedad, es el segundo mayor contribuyente de las campañas de Rubio. Entre 2009 y 2014, Singer le entregó al senador a través de dicha firma 117.620 dólares de acuerdo a los datos arrojados por el Centro de Política Responsable (CRP, por sus siglas en inglés) -un grupo de investigación que realiza un seguimiento de los efectos de dinero y el cabildeo sobre las elecciones y la política pública en Estados Unidos-.

Asimismo, según denuncia el mismo organismo de control político, la firma de abogados Lowenstein Sandler que representó al fondo NML en el juicio contra la Argentina, es el segundo mayor financistas de las campañas de Méndez, durante el período 2009-2014 le entregó 117.160 dólares. Cabe señalar que el senador está bajo investigación penal por presunta negociación con dos banqueros prófugos de Ecuador, señala Buenos Aires Herald.

Por otro lado, el republicano Mark Kirk, senador por Illinois recibió más de 95.000 dólares de los empleados de Elliot Management Corporation según los datos del CRP publicados por el diario estadounidense. El senador es un gran crítico de Argentina y denunció incluso al Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner por el acuerdo firmado con Irán para investigar de manera conjunta el atentado contra la mutual israelí de la AMIA en 1994, al igual que otros legisladores que han recibido dinero de Singer y sus asociados.

A la lista de lobby del NML, se suma el ex representante republicano por Florida, Connie Mack, autor de la Ley de Juicio a Estados Extranjeros por Evasión Financiera, el marco legislativo que permitió a los fondos especulativos exigirle a la Argentina el pago de la deuda a valor nominal. Elliot Management Corporation es su mayor contribuyente con 40.000 dólares.

A su vez, indica el medio estadounidense, tras abandonar el año pasado su cargo en el Congreso, Mack se convirtió en socio de la firma de cabildeo Liberty Partners Group, que se encargó de boicotear los esfuerzos de una delegación de legisladores argentinos que viajó a Estados Unidos para defender la posición de su país frente a los fondos buitres en las vísperas del fallo del máximo tribunal. Para el mismo propósito se sumaron los senadores Méndez y Rubio.